Para el Gobierno Federal es importante trabajar por una sociedad que acoja, respete y acepte la diversidad sexual y de género, tanto en Alemania como en el mundo.

Me complace que con la apertura del matrimonio a las parejas del mismo sexo del 30 de junio de 2017, hayamos logrado un progreso significativo. Desde hace varios años, el Gobierno Federal ha abordado sistemáticamente la diversidad de género, en particular la situación específica de las personas trans- e intersexuales. El Plan de acción nacional contra el racismo, que se relanzó en junio de 2017, se ha ampliado para incluir la homofobia y la transfobia.

Alemania también apoya los derechos de las personas lesbianas, gays, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) a nivel internacional. Por ejemplo, el Ministerio de Relaciones Exteriores financia proyectos de derechos humanos que fortalecen los derechos de las personas LGBTI. En el año 70 de la Declaración Universal de Derechos Humanos (DUDH), es importante enfatizar que "todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos" (Artículo 1 DUDH). Entonces, no se trata de "derechos especiales" cuando trabajamos por fortalecer las demandas de las personas LGBTI: se trata, por ejemplo, de luchar por la no discriminación, el derecho a la libertad de expresión y reunión, y el derecho a la integridad física. Desafortunadamente, las experiencias de hostilidad, odio o incluso violencia psicológica y física son comunes para muchas personas LGBTI. En algunos Estados, incluso enfrentan arrestos, torturas o la pena de muerte.

Me gustaría aprovechar este día para agradecer a todos los que defienden la tolerancia y la no discriminación: su trabajo es importante; vamos a trabajar juntos por la diversidad, el respeto y la tolerancia.