En todo el mundo, Alemania está comprometida con condiciones de trabajo justas.

Para cuando llegan a las vitrinas o a los supermercados, la mayoría de los productos han cruzado numerosas fronteras. En una economía interconectada a nivel mundial, los derechos de los trabajadores también se están convirtiendo en una cuestión internacional.


Los derechos de los trabajadores son una cuestión mundial

  En una economía interconectada a nivel mundial, los derechos de los trabajadores también se están convirtiendo en una cuestión internacional © dpa

El Ministerio Federal de Relaciones Exteriores analiza las consecuencias sociales de la globalización. Trabaja en estrecha colaboración con el Ministerio Federal de Trabajo y Asuntos Sociales, los sindicatos y las asociaciones patronales, entre otros. Una de las tareas del Ministerio Federal de Relaciones Exteriores es apoyar a las empresas alemanas en el extranjero para que puedan desempeñar un papel importante en el desarrollo hacia unas condiciones de trabajo justas en otros países.

Las cambiantes demandas a los empleados en todo el mundo


El número de trabajadores que laboran en el sector de los salarios bajos está aumentando en todo el mundo. Al mismo tiempo, el sector informal está ganando importancia en términos de cifras.


La digitalización está creando nuevos trabajos y nuevas formas de empleo. Al mismo tiempo, pone a prueba el concepto de participación de los trabajadores. Los mecanismos y leyes de protección que hasta ahora se han adaptado a las relaciones laborales tradicionales deben revisarse y, de ser necesario, ampliarse a nuevas formas de empleo que merecen protección. Además, se hace necesario ofrecer a los empleados –también en Alemania– una formación permanente y ofertas de cualificación que vayan más allá del campo profesional originalmente aprendido. Solo de esta manera los empleados serán capaces de dar forma activamente a los retos futuros.


Avances solo mediante la cooperación internacional


Para Alemania, está claro que, en tiempos de actividad económica mundial, el progreso sostenible de los derechos laborales solo puede lograrse mediante la cooperación multilateral. Por lo tanto, el Gobierno Federal ha hecho de la protección de los derechos de los trabajadores un tema central de las Presidencias alemanas del G7 y del G20. Las normas laborales básicas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) son la directriz más importante a estos efectos. También se hace referencia a ellas en el Plan de Acción Nacional para las Empresas y los Derechos Humanos (NAP, por sus siglas en alemán). Las normas laborales básicas consisten en convenios internacionales que establecen normas laborales y sociales dignas en las esferas de la libertad de asociación y la participación de los trabajadores, la igualdad de derechos y la prohibición del trabajo infantil y el trabajo forzoso.


Nuevos desafíos para el modelo social alemán


La economía alemana también se fortalece gracias a la buena cooperación entre los interlocutores sociales (organizaciones de empleados y empresarios). Esto se basa en gran medida en el exitoso modelo de participación de los trabajadores: en todos los niveles de una empresa y de una compañía, todos los involucrados participan en la toma de decisiones importantes. Sin embargo, la red mundial de trabajo y producción presenta al modelo alemán nuevos desafíos. La participación del trabajador tiene lugar cada vez más en las estructuras europeas e internacionales. Es importante aquí probar nuevas formas de diálogo social, integrar las tradiciones de participación de otros países y armonizarlas con la exportación del modelo alemán de participación. El funcionamiento de la asociación social crea estabilidad y ha demostrado su valor en Alemania, especialmente en tiempos de crisis.


Red mundial de expertos


Los consejeros de asuntos sociales especializados trabajan en numerosas embajadas alemanas. Ellos conectan al Gobierno Federal con la sociedad civil mundial, los ministerios de trabajo, asuntos sociales y salud, los sindicatos y las asociaciones de empleadores en todo el mundo. Sus informes se incorporan a la labor del Ministerio.

Texto original: Ministerio Federal de Relaciones Exteriores