Tercer Plan de Acción del Gobierno Federal para la aplicación de la Resolución 1325

Con la Resolución 1325, el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas subrayó la importancia de las mujeres en los procesos de paz en octubre de 2000. Desde entonces, Alemania ha trabajado en todo el mundo para poner en práctica la agenda "Mujeres, Paz y Seguridad" establecida en aquel momento: en zonas de crisis, en organizaciones multilaterales y a nivel regional.

El Gabinete Federal adopta hoy el tercer plan de acción del Gobierno Federal para la aplicación de la agenda. El plan de acción establece seis prioridades. Los cuatro ámbitos principales de la agenda deben avanzar: la prevención de crisis, la participación de las mujeres en los procesos de paz, la protección contra la violencia sexual, y el apoyo a las sobrevivientes y el empoderamiento de las mujeres en la gestión de crisis.

Además, hay que reforzar la agenda y darla a conocer mejor, tanto a nivel internacional como en Alemania. Asimismo, las estructuras propias de Alemania también deben ser objeto de atención para anclar la agenda aún más firmemente en el trabajo del Gobierno Federal.

El Ministro de Relaciones Exteriores Maas subrayó:

Trabajar por la paz fuera de las mesas de negociación

En muchas regiones en crisis, las mujeres llevan mucho tiempo realizando una importante labor en los procesos de paz, pero este trabajo a menudo no es percibido. Las mujeres negocian con las milicias para liberar a sus hijos. Crean espacios protegidos en zonas de crisis para proteger a sus comunidades. Negocian los corredores humanitarios para garantizar el suministro de alimentos, a menudo mucho antes de que lleguen las organizaciones de ayuda.

Este hecho contrasta fuertemente con las negociaciones de paz formales, en las que las mujeres siguen sin desempeñar un papel oficial. Entre 1992 y 2019, en promedio, solo el 13% de los negociadores eran mujeres, a pesar de que los estudios demuestran que la participación de las mujeres aumenta las posibilidades de lograr una paz sostenible y conduce a acuerdos que contienen más disposiciones que benefician a mujeres y hombres por igual.

Resolución 1325: Justificación de la Agenda “Mujeres, Paz y Seguridad”

Cuando el Consejo de Seguridad adoptó por fin la Resolución 1325 en 2000, que abordaba el papel de las mujeres en los procesos de paz y seguridad, fue aclamada por muchos como una sensación: por primera vez, el Consejo de Seguridad afirmó que la participación de las mujeres era necesaria para construir y mantener la paz. Así, la prevención de conflictos, los procesos de paz y la rehabilitación posconflicto se entienden como derechos de las mujeres y, por tanto, como derechos humanos. Y lo que es más: por primera vez, el Consejo de Seguridad demostró que la violencia sexual y de género no es un efecto secundario inevitable de las guerras, sino un delito que debe ser prevenido y castigado sistemáticamente.

A lo largo de los años, la resolución se completó con las resoluciones de seguimiento 1820, 1888, 1889, 1960, 2106, 2122, 2242, así como con las resoluciones 2467 y 2493 presentadas por Alemania.

Compromiso multilateral con las mujeres, la paz y la seguridad

A nivel internacional, la agenda de “Mujeres, Paz y Seguridad” también fue un eje temático de la participación de Alemania en el Consejo de Seguridad en 2019 y 2020. Bajo la presidencia alemana, en abril de 2019 se adoptó la Resolución 2467, en la que se pide que se preste apoyo a las supervivientes de la violencia sexual y que los perpetradores rindan cuentas.

Redes en África y América Latina

Alemania también está comprometida con la agenda de “Mujeres, Paz y Seguridad” más allá del contexto de la ONU. Como coiniciadora de la Red de Mujeres Líderes Africanas, Alemania apoya a las mujeres en la transformación de los países africanos, especialmente en los ámbitos de la gobernanza, la paz y la estabilidad. La red germano-latinoamericana Unidas, fundada en 2019, también promueve el trabajo en red y apoya proyectos feministas de organizaciones latinoamericanas.

Alcance en las regiones en crisis

En contextos de crisis, Alemania refuerza la participación política de las mujeres, por ejemplo, a través del Fondo para la Mujer, la Paz y la Acción Humanitaria, en cuya configuración Alemania desempeña un papel fundamental como segundo mayor donante. Alemania también trabaja con la población civil local para prevenir la violencia sexual y empoderar a las supervivientes. Por ejemplo, junto con un gran número de socios de proyectos como la Fundación Mukwege, medica mondiale, la Organización Internacional para las Migraciones y el All Survivors Project, Alemania contribuye al apoyo médico y psicosocial de las supervivientes de la violencia sexual.