Berlín (dpa) - Para aumentar la producción de coches eléctricos es necesario asegurar el suministro de las materias primas más importantes, según un estudio realizado por el instituto de ecología aplicada Öko-Institut, con sede en Friburgo, en el sur de Alemania.

La investigación señala que, a pesar de que a escala mundial haya suficientes reservas de litio, cobalto, grafito y níquel para la producción de baterías, es probable que los yacimientos no se exploten lo suficientemente rápido, lo que provocaría que la oferta, especialmente la de litio y cobalto, sea por momentos escasa y el precio suba.

Por ello, se hace necesario un mayor reciclaje, que se podría lograr a través de, por ejemplo, una ley de cuotas fijas en toda Europa. También se recomienda que se obligue a la industria a respetar los estándares medioambientales y sociales en los países productores.

"La electromovilidad es la clave para el cambio energético en el transporte", señaló Christian Hochfeld, director de la empresa privada de investigación Agora Verkehrswende, la cual encargó el estudio. "Pero la aceptación de los coches eléctricos depende también de si las materias primas pueden ser obtenidas bajo condiciones económicas y sociales razonables", agregó.

Las baterías de iones de litio serán el estándar en los coches eléctricos como mínimo hasta el año 2030, pronosticó Matthias Buchert, autor del estudio. Para alcanzar la meta de limitar el calentamiento global a dos grados centígrados hasta el año 2100, la demanda de litio en la producción de baterías se quintuplicará hasta el año 2030 y ascenderá a quince veces el valor actual a mediados de siglo. Estas estimaciones se basan en los pronósticos de venta de coches eléctricos de la Agencia Internacional de Energía (IEA).